Los perros...

En todo el mundo hay leyendas urbanas, esta es una de ella y pasa en la Ciudad de Mèxico, ahì en el centro, calle especifica podrìamos decir Rep. de Bolivia en una de las tantas vecindades.

Todo comienza cuando se empieza a notar la desaparición de muchos hombres, podrìa decirse que tal vez se fueron de ahì a otro lugar, sin embargo desaparecen una noche, nadie sabe nada y dejan sus cosas en alguno de los departamentos que rentaban.

La gente murmura, hacen conclusiones y no dejan escapar ni la idea màs descabellada. El párroco de la iglesia de Santo Domingo tan solo decìa que oraran, aunque el estaba preocupado ya que muchas veces llego a encontrar perros en la calle, podrìamos decir que tiene de raro eso??... Solo son perros, pero que sucede cuando se encuentran por pares y ademàs esta muy lastimados, mutilados, seguramente sen enfrentaron en feroces batallas.

Una noche el párroco fue a Rep. de Costa Rica esquina con Florida, llego a un lugar donde se hacían peleas callejeras de todo tipo, el encargado se puso algo nervioso, màs el párroco solo fue a pedir que ya no tirara a sus perros cerca de la iglesia, si no tendrìa que dar aviso a las autoridades.

El dueño se quedo atónito, no sabìa de lo que hablaba el párroco, fue cuando tuvo que confesar que el no tiraba a los perros, si no que los vendia, que muchos de ellos terminaban siendo carne para tacos...tacos de perro??

Por una parte el párroco se molesto, como era posible que el hiciera eso, cuanta gente no comerian. Le dio un sermón, aunque el sabìa que el señor no dejarìa de hacer eso, tan solo se fue y volvió a la iglesia.

Por un tiempo el párroco se olvido de los perros, aunque los perros no dejaban de aparecer.

La gente seguìa hablando muchos temian ser los próximos en desaparecer, aunque no supieran como, no tenìan pistas, nunca aparecieron cuerpos.

Un dìa después una jòven de piel blanca, de 1.65 de estatura, cabello largo, chino y negro, ojos color miel, delgada, de edad aproximadamente unos 19 o 20 años... se acerco al párroco, a hacerle unas preguntas sobre el sermón, màs el habìa quedado hechizado por ella.

Ella vivía en una de las vecindades aledañas a la iglesia, eran muy pocos los que la conocían y eso no garantizaba que supieran algo de ella.

Cada Domingo el párroco esperaba verla y un oscuro deseo habìa nacido en su interior.

Una noche sin siquiera darse cuenta comenzo a fantasear con ella, y por la ventana entro, no podìa creerlo, el se quedo sentado sin habla, ella poco a poco se quito la ropa, tomo las mano del párroco e hizo que la acariciara, mientras el se pedio en ese exquisito pedazo de carne, ella fue quitándole la ropa lentamente, se subió en el y comenzo a hacerle el amor.

Era tanto el fuego, la pasión, el sentir su cuerpo caliente, escuchar sus gemidos, si era mucho mejor de lo que el hubiese imaginado, sabìa que cometìa un pecado, no le importo. aguantarìa el castigo... Por fin probo uno de sus besos, eran con un veneno que lentamente lo iba matando, en eso tocaron la puerta, el se detuvo... Pero que pensarìa la gente?.... Por Dios...

Le dijo que se quedara ahi, que el solucionaría todo, cuando volteo ella no estaba... Se puso un pans, una playera... Al abrir la puerta se llevo una sorpresa.

Continuara...