Capítulo uno: mente atrofiada... porque pienso mil y un cosas, aunque aveces no se como expresarlas para que el mundo realmente pueda entender un poco de lo que digo.
Tenía al principio una idea, súper idea, sobre una historia que ya no se si fue real o tan solo un vago pensamiento que paso en unas cuantas noches de encierro.
Como es posible que me tengan aquí encerrada si soy todo un amor, un genio, grandiosa y maravillosa, a caso esta malo no ser parte de este mundo y vivir en una realidad alterna?
Hay veces en las que mil y un imagenes atacan a mi mente, pero no se que es verdad, aunque comienzo a preguntarme que es la verdad?? que es la realidad?? vamos si uno lo piensa existe, por tanto al momento que existe es verdad, aunque no sea visto por alguien mas o no?
El ejemplo más claro es DIOS nadie lo ha visto pero muchas personas creen en el, entonces que importa que nadie viera los horrores, alegrías, tragedias, fiestas, momentos etc... si algunos que no están ahora y yo los vimos??
Creo que ya comencé con un rollo muy filosófico, así que ahorita que estoy en un momento de lucides comenzare a contarles parte de esta historia.
Hace unos años yo era una mujer libre, alegre, liberal, divertida y sobre todo buena amiga, vivía en un colonia algo conflictiva, gente voluble, edificios y pequeños parques, ya muy poca vegetacion, poco a poco todo llenandose de gris.
En el departamento en el que habitaba habia una familia de 9 miembros de los cuales a lo mucho 3 estábamos al mismo tiempo, era extraño... tal vez a la hora de dormir nos veíamos las caras, pero no cruzábamos ninguna palabra.
En un cuarto dormíamos 3 chicas, en otro cuarto 4 chicos y por ultimo mis padres en otro cuarto, no recuerdo cuando fue la ultima vez que nos reunimos ya fuera a jugar un juego de mesa, ir algún evento, celebraciones como navidad...
Bueno en fin, supongo que ahorita no tiene mucha importancia que yo les cuente de mi ya que la historia que les contare no se trata de mi, solo soy el juglar, narrador, cuenta cuentos, transmisor... que les compartira esta historia.
Tenia 12 años cuando todo sucedió, como todos los niños me juntaba con una bola de chamacos de mi unidad, pero queríamos nuestro lugar secreto para poder planear travesuras, leer comics, estar sin que nadie nos molestara... así que a Adam se le ocurrió que entráramos a la casona del Peral, ya que estaba abandonada y nadie nos buscaría ahí.
Todas las tardes después de la escuela nos reuníamos, era el lugar perfecto sin ruido, ni chicos malosos que nos molestaran...
Todo iba de maravilla, hasta que después de 3 meses comencé a tener terribles pesadillas.
1 comentario:
Gracias Nini :) bueno por fin puedo leer algo nuevo :D
te mando un beso y eres bienvenida a pasar a mi muy botado blog :P
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