Con palabras e imágenes me bombardeaste, no pude evitar ser tan humano y embriagarme con ego.
Comí mariposas escarlatas que por dentro me incendiaban, no pude evitar eructar todas aquellas pasiones.
Sonreí al verte, leerte y convertirte en un reto, me eleve tan alto en este loco juego momentáneo que no me importo caer tan sólo para desarmarme.
Tú lo dijiste eres un monstruo y yo, sin precaución me acerque para salir corriendo por los miedos que yo he creado después de mi accidente.
Ahora vuelvo a este rincón, donde en soledad me asfixio, donde vómito todo aquello.
Una y otra vez repito: ¡esto es un juego! ¡Esto no es cierto! ¡Sólo soy un juego! ¡Esto no es cierto!
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